[8/04/2010 - ACTA] Miles de trabajadoras y trabajadores estatales de todas las provincias se movilizaron ayer en la Capital Federal bajo las consignas “aumento salarial, pase a planta permanente, equiparación de asignaciones familiares, 82 % móvil, recuperación de las cajas de jubilaciones y obras sociales, convenios colectivos de trabajo”. Fue un paro y movilización federal que alcanzó una alta repercusión en todo el país. Además, los jubilados exigieron el tratamiento del proyecto de ley por la movilidad jubilatoria.
Las provincias presentes
Luego habló la secretaria general de ATE Mendoza, Raquel Blas, quien dijo: “vivimos en provincias ricas, estamos en un país rico que cada vez acumula más en pocas manos, es fundamental que corten ya con los planes, subsidios y que nos devuelvan la dignidad, que se reparta la coparticipación como se debe, no queremos limosnas, queremos nuestros recursos y los queremos para salud, educación, para trabajo y para justicia”. Y subrayó: “estamos acá para decir, que no estamos conformes mientras haya un trabajador con el sueldo inferior al costo de la canasta familiar”.
Otro de los oradores fue el secretario general de ATE Salta, Vicente Martí, quien recalcó: “Estamos con el compromiso de ratificar nuevamente la pelea permanente que tenemos hoy por la salud pública. A los legisladores, gobernadores, a la señora presidenta le decimos basta de negocio con la salud pública, basta de autogestión hospitalaria, basta de terciarizaciones, basta de entrega, hospital público, gratuito y universal para todos”. “No nos cansamos de decir que la salud publica es un derecho y es obligación del Estado brindarla”, finalizó Martí.
En el mismo sentido, Miguel Pelandino, secretario general de ATE Entre Ríos, denunció que desde el Estado no se le da la importancia a la salud pública. “Queremos en este día, unificar todas las fuerzas que tenemos entre todos, desde norte a sur, ir juntando día a día para pelear por condiciones dignas de trabajo y por una mejor distribución de la riqueza”.
El cierre del acto estuvo a cargo del secretario adjunto de ATE, Julio Fuentes. “Los trabajadores del Estado no nos vamos a resignar a que el empleo público sea sinónimo de pobreza. No nos da vergüenza decir que lo que reclamamos es aumento de salario. Somos los que todos los días del año nos levantamos para ir a trabajar, porque todos los días del año hay hospitales abiertos, todos los días hay que limpiar las escuelas, hay que recoger los resididos, hay que alimentar a los niños, hay que atender los cementerios, hay que atender cada lugar donde nosotros cumplimos funciones. Nosotros trabajamos por eso no nos da vergüenza decir que lo que queremos es un salario digno, que queremos cobrar asignación familiar digna, que queremos vivir con dignidad y estamos dispuesto a pelear”.
“Cuando nosotros les reclamamos a los gobernadores, nos dicen que no tienen dinero, pero vienen acá agradeciendo el ajuste permanente que nos han instalado. Y es por eso que nuestra pelea por salario, por condiciones laborales, toma ese sentido la lucha por una distribución justa de los impuestos en nuestro país. Hay más de 3 millones y medio de trabajadores provinciales y municipales, y ahí va a parar solo el 25 % de los impuestos. El resultado es pobreza y mala calidad en los servicios”
“Y es por eso que nuestra lucha por salarios y condiciones laborales, adquiere también el sentido de una justa coparticipación de los impuestos, que todo el pueblo argentino paga, quiere que el grueso de los impuestos vuelvan a los servicios públicos”, finalizó.
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